Estimado Presidente Santos,

Las organizaciones de mujeres firmadas debajo de aplaudan su decisión de iniciar un proceso de diálogo con las fuerzas rebeldes para poner fin al conflicto armado. Creemos que la construcción de un proceso de negociación de paz es un paso vital y necesario.

Después de tantos años de confrontación, donde la población civil y las comunidades sobre todo indígenas, afrocolombianos, mujeres y niños han sido más afectados en su vida diaria, poner fin a esta guerra endémica es imprescindible en orden de Colombia iniciar el proceso de reconciliación.

En este sentido, Señor Presidente, creemos que así como negociación con la guerrilla es necesario buscar un fin al narcotráfico, bandas criminales y paramilitares que suponen una seria amenaza al proceso de paz. Estamos convencidos de que los grupos rebeldes armados deben regresar a la vida civil para participar y construir ciudadanía junto con el resto de la sociedad.

Las organizaciones de mujeres apoyan este proceso de diálogo y negociación y esperamos que resultará en un camino hacia la paz, es decir, no hay grupos armados. Como activos constructores de paz desde diversas perspectivas esperamos permanente verdad, justicia y reparación para las violaciones de los derechos de las mujeres y en particular la violencia sexual dentro de este conflicto.

Además, reconocemos las contribuciones de las mujeres hacia la paz y su experiencia en diferentes campos. Por lo tanto esperamos que representantes del gobierno de las mujeres en la mesa de negociaciones. Asimismo, esperamos que el gobierno a insistir en que la guerrilla también hacerlo. Las resoluciones 1325 y 1820 del Consejo de seguridad de las Naciones Unidas reconocen el papel de la mujer en la prevención de conflictos y la importancia de su participación en mesas de negociación de paz.

El grupo de trabajo de la resolución 1325 en Colombia ha estado vigilando continuamente los indicadores de su aplicación, uno de los cuales señala el número de mujeres en los foros y comités de negociación. En este sentido, Señor Presidente, por favor considere las siguientes recomendaciones.

Respetuosamente,