"Acción histórica", que es cómo ACNUR y analistas han llamado la decisión del gobierno de Tanzania para conceder ciudadanía a más que 162.000 refugiados burundeses que han estado viviendo allí desde hace casi cuatro décadas.

Visitar el establecimiento Katumba de los llamados "refugiados burundeses 1972" el jueves pasado, la Comisaria de alta de las Naciones Unidas para los refugiados, Antonio Guterres alabó el gobierno de Tanzania por su "generosidad sin precedentes y valiente decisión" en la búsqueda de soluciones duraderas para los refugiados burundeses. También llamó a los países donantes a responder ayudando a Tanzania a integrar a sus nuevos ciudadanos.

En el año 2000, empezó un proceso de paz en Burundi y el primer éxito, después de un conflicto, las elecciones generales se celebraron en 2005. El ACNUR ha ayudado a la repatriación voluntaria de más de 500.000 refugiados burundeses de países vecinos, principalmente Tanzania.

En 2008, gobierno de Tanzania ofrece a los refugiados restantes una decisión de concesión de ciudadanía o de repatriación de Burundi. Un estimado 54.000 viven en campamentos de refugiados consecutivamente a la guerra civil de 1993 decidió volver a casa.

Los 162.000 nuevos ciudadanos de Tanzania son en su mayoría Hutus que habían huido a Burundi en 1972 para escapar de la violencia étnica que dejó más de 200.000 muertos.  Estos refugiados no fueron confinados a los asentamientos de refugiados y ya en gran parte fueron integrados en la sociedad y la economía de Tanzania. Después de más de 30 años eran muy reacios a regresar a Burundi y defendido por naturalización durante mucho tiempo.

Explicando las razones de la decisión, el Ministro del Interior tanzano, Masha de Lawrence, dijo "pensamos que no era bueno para ellos - sino también para la seguridad de Tanzania - que un grupo de cerca de 200.000 que no tienen ningún lugar para llamar a casa. Como ciudadanos de Tanzania, son libres de vivir en todas partes del país y tendrán acceso a los servicios sociales como cualquier otros tanzanos,"Masha dijo AlertNet.

Pasado mes de enero visité Muriza aldea de la paz, en la oriental provincia de Ruyigi, donde algunas personas se enfrentan a todo tipo de dificultades para reintegrar, a ciertos habitantes de la aldea, especialmente aquellos que vinieron de Tanzania, me dijo que fueron tentados por un exilio segundo. Según ellos, los medios de vida son mejores en Tanzania. Sin embargo, ellos ya han hecho su decisión y ahora deben reconstruir junto con otros burundeses una sociedad pacífica y próspera.

Corresponsal local de Burundi, 22 de abril de 2010